Esta feria pone en valor las tradiciones textiles de esta localidad del norte de Chile, donde las agrupaciones de artesanos se forman por lazos familiares. Es común que las agrupaciones sean lideradas por una matriarca, quien reúne a sus hijos y nueras para realizar el oficio, tejiendo piezas de la misma forma en la que tejen sus relaciones humanas. Justamente son las mujeres mayores las que traspasan el oficio a sus hijas e hijos, y recae en ellos la responsabilidad de incorporar una mirada más innovadora en el diseño y colorido de las piezas.
Esta tradición tiene grandes historias detrás, que incluso han hecho destacar a artesanas con Sellos de Excelencia o Indígena entre sus filas.