• La publicación rescata las historias de 110 personas que se albergaron en nuestro país tras sufrir el exilio y la persecución antes y durante la Segunda Guerra Mundial y que encontraron en Chile acogida y esperanza.  
  • El proyecto editorial, dirigido por Fundación Memoria Viva será lanzado el 29 de noviembre en Corpartes.

Noviembre 2016.- Se estima que fueron más de 1.800 personas las que llegaron a Chile buscando refugio del Holocausto o la Shoá como la conoce el pueblo judío. “Memoria Viva: historias de refugiados y sobrevivientes del Holocausto que se albergaron en Chile” es el título de la publicación testimonial  que contiene 110 testimonios y fotografías de supervivientes de la Shoá que se albergaron en nuestro país.

Este proyecto editorial a cargo de Fundación Memoria Viva (FMV), entidad cuya misión es registrar, preservar y difundir los testimonios de sobrevivientes del Holocausto en Chile, nació tras un intenso trabajo de investigación y culminó en la elaboración de entrevistas en formato audiovisual de alta definición. En este archivo digital se encuentran testimonios de quienes vivieron situaciones extremas como la "Noche de los cristales Rotos", Campos de concentración, guetos, escondites, hambre y enfermedad. Una investigación que inició el 2009 y que continúa activa hasta la fecha con 122 registros.

“El espíritu del libro es mantener el relato oral del refugiado y del sobreviviente, perpetuar su experiencia límite. Esto va mucho más allá del origen religioso o étnico, sino que son vivencias traumáticas en que nos vemos obligados a pensar qué es lo que nos conduce a actuar hacia el mal y también, hacia el bien. Queremos entregar un espacio de reflexión, de conocer cómo el ser humano es capaz de sobreponerse al horror, de inmigrar sin el idioma y superar de cierta forma la pérdida abrupta de la juventud y la inocencia. Memoria Viva es un gran testimonio de la fortaleza del ser humano, es un legado inmenso para Chile, sobre todo hoy, cuando vemos que nuestra sociedad acoge como nunca a los inmigrantes y debemos enfrentar una sociedad multicultural. Debemos activamente fomentar las buenas practicas y los derechos humanos”, enfatiza la directora ejecutiva de Fundación Memoria Viva, Karen Codner.

Memoria Viva invita a reflexionar acerca del dolor experimentado por los refugiados, su fortaleza y esperanza. Al mismo tiempo, realiza un homenaje a Chile como país que acoge, brinda oportunidades y refugio frente a situaciones extremas. Esta edición que fue el trabajo de un equipo de profesionales de primer nivel, contó también con el apoyo financiero de la Embajada de Alemania en Chile con la firma de un convenio de cooperación en la difusión de las historias de las víctimas del Holocausto, el que fue firmado a comienzos de noviembre de este año.

Esta alianza marca un precedente histórico en las relaciones entre Alemania y judíos que se albergaron en Chile. Con esto, se inicia a una etapa de conciliación y entendimiento para construir un mejor futuro y una educación que vele por los derechos humanos y la integración del inmigrante. Se trata de un vínculo que insta a la colaboración estrecha y abierta de la Alemania actual con la comunidad judía chilena y la educación sobre el Holocausto a nivel nacional.

Memoria Viva,  fue pensado desde un primer momento como un aporte al patrimonio cultural de Chile y por lo mismo será distribuido  gratuitamente en colegios, universidades y bibliotecas públicas del país. Así se busca fomentar la educación cívica, la promoción de los derechos humanos y la integración, aumentar el conocimiento sobre el Holocausto y hacerlo significativo para los ciudadanos. Además estará complementado con un portal web en que se profundizará sobre los mismos testimonios que aparecen en libro (será lanzado en el 2017).

El lanzamiento oficial se realizará el 29 de noviembre a las 19:30 horas en Corpartes, ubicado en Rosario Norte 660, Las Condes. El libro se puede adquirir en Fundación Memoria Viva (contacto@fundacionmemoriaviva.cl, www.fundacionmemoriaviva.cl) y en la Librería Ulises de Lastarria en el Centro de Santiago.

Fuente: Fundación Memoria Viva