Josefina Guilisasti ha transitado desde la naturaleza muerta a la instalación, de manera fluida y coherente. Con estudios de arte en la Universidad de Chile y de pintura escenográfica en Italia, en sus obras, la preocupación por el montaje y el lugar del espectador, conviven con inquietudes de carácter histórico y social asociadas al patrimonio material. Ya en sus primeras piezas reconocidas, los objetos domésticos eran abordaos con el lenguaje pictórico, en un ejercicio que jugaba con el punto de vista del observador y la ubicación de las obras en la sala. En esas piezas, el academicismo pictórico se fundía de manera natural con la estética de las instalaciones y anticipaba sus preocupaciones de hoy, relacionadas con las artesanías, la historia y el trabajo multidisciplinario.
Artista de vastas preocupaciones e intereses, Guilisasti ha desarrollado instalaciones, videos, pinturas y fotografías incorporando lo saberes y prácticas de las más diversas disciplinas técnicas e intelectuales. Así su obra la ha sacado del trabajo solitario del taller, para conectarla con profesionales y artífices de distintos lugares. Aquella apertura, es reconocible en su producción artística y en la capacidad de abordar -desde distintos puntos de vista- la cultura material y la memoria.