• Hoy miércoles 31 de mayo, Ediciones Mis Raíces realizó el lanzamiento de la edición ampliada y mejorada de la publicación Artesanías para Jugar. Región Metropolitana, Chile, llevando a cabo en este contexto, una de las nuevas actividades que se proponen en esta edición, junto a niños y niñas de la Escuela Nanihue de San Ramón. 

Para cerrar con broche de oro este mes del patrimonio, Ediciones Mis Raíces presentó esta mañana, ante una atenta e impaciente audiencia, "Artesanías para Jugar. Región Metropolitana, Chile. Nueva edición mejorada y ampliada", proyecto financiado por el Fondo Nacional de Fomento del Libro y la Lectura 2017, del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes.

El evento tuvo lugar en la Escuela Básica Nanihue, en San Ramón, junto a los dos artesanos que fueron incluidos en este libro: Eladio Riquelme y Richard Bravo.

Eladio Riquelme se dedica a la fabricación de juegos típicos chilenos desde los 26 años. Es ingeniero de profesión, no obstante, ha decidido dedicarse por completo a este oficio, su pasión. Hoy, en el aula del tercero básico, contó a niños y niñas cómo hace algunos años, arregló una rana de bronce maltrecha, siendo esto el punto inicial para interesarse por nuestro patrimonio de juegos y juguetes. En este nuevo libro, este artesano nos invita a conocer más acerca de nuestro deporte nacional, la rayuela, mostrándonos los tejos y el cajón que él fabrica, y animándonos a confeccionar los nuestros con latitas de betún y una caja de zapatos.

Posterior a la presentación de Eladio, fue el turno de Richard Bravo, quien dejó maravillado a su público con sus impresionantes reproducciones de aves de Chile en madera. Richard explicó a los estudiantes que existen más de 400 especies de aves en nuestro país, y únicamente, alrededor de 10 de ellas son endémicas de Chile. Previo a su actual oficio, Richard se dedicaba a la fabricación de muebles en madera, y un día, cansado de su trabajo, se puso a experimentar con este material, obteniendo una rústica réplica de un pájaro. Ese día surgió la idea de rescatar nuestro patrimonio cultural, por medio de la confección de réplicas de aves chilenas, junto a su hijo Ariel, quien se encarga de dar los colores característicos y exactos a cada pieza.

Luego de estas presentaciones, los estudiantes de tercero básico desarrollaron la actividad que se propone para emular las obras creadas por Richard y Ariel. En base a pelotas de plumavit, papel absorvente, colafría y pintura, niños y niñas dieron vida a sus propias versiones de la especie de loica que habita la región metropolitana.

¡Hoy presenciamos la creación de grandes obras de artesanía chilena!