Cuatro ilustradores nacionales y 4 provenientes de Suecia, Noruega, Finlandia y Dinamarca fueron seleccionados e invitados por Fundación Mar Adentro y las respectivas embajadas a hacer una residencia en áreas protegidas de Pucón y Chiloé. Los acompañaron científicos chilenos expertos en conservación. Finalizaron su visita haciendo talleres en escuelas de las zonas y para toda la comunidad. En la Escuela Carileufu pintaron un mural.
“La ilustración es un arte y al mismo tiempo un medio de comunicación eficiente para crear cultura. Cómo fundación nos hemos propuesto aportar a los cambios de hábitos para respetar la naturaleza y a nuestro patrimonio cultural. Este programa de residencias que cruza arte, naturaleza, ciencia y educación, creemos que tendrá consecuencias inéditas en el conocimiento y difusión del cuidado de nuestro patrimonio natural y cultural desde la mirada del arte”, comenta Madeline Hurtado, presidenta de Fundación Mar Adentro.
La residencia -que el próximo año se difundirá en un libro coeditado con Saposcat-convocó a 14 profesionales de diversas disciplinas y países para convivir en áreas protegidas chilenas para la conservación de su biodiversidad. Durante 10 días generaron redes (entre el 14 y el 23 de noviembre), buscaron interrelaciones entre arte y naturaleza incorporando la ilustración y los estudios científicos como medios para pensar y comunicar sobre temáticas del entorno natural.
Entre los chilenos fueron seleccionados –bajo la curaduría de Maya Errázuriz y Amparo Irarrázaval, ambas del equipo de Fundación Mar Adentro– los ilustradores Daniela William, José Tomás Olivos, Sebastián Ilabaca y Matías Prado. Ellos convivirán con sus pares Bjørn Rune Lie (Noruega), Katrine Clante (Dinamarca), Siri Ahmed Backstöm (Suecia) y Linda Bondestam (Finlandia), gracias a una alianza con las embajadas de Suecia, Noruega, Finlandia y Dinamarca que posibilitó que los 4 ilustradores fuesen elegidos y viajaran a Chile.
“Fueron varios los requisitos de selección. Buscamos ilustradores que tuvieran experiencia en hacer talleres porque realizaremos actividades formativas”, comenta Amparo Irarrázaval y complementa: “Además, elegimos chilenos nacidos en la década de los 80 porque queríamos que fueran de temprana trayectoria para darles la oportunidad de compartir con escandinavos con mayor experiencia, nacidos en los 70. Los ilustradores chilenos han realizado exposiciones, publicaciones, trabajan como diseñadores de arte o son independientes. Algunos de los escandinavos trabajan para diarios como The New York Times; han expuesto en el extranjero; tienen destacados clientes como The British Library; han sido traducidos a varios idiomas o son autores de numerosos libros”.
Dentro de los criterios curatoriales se buscó que los artistas no fuesen especializados en ilustración botánica o de naturaleza y que tuvieran experiencia en distintos soportes de diseño, que demostraran amplitud técnica como diseño gráfico, muralismo, dibujo, complementa Maya Errázuriz. “La versatilidad y la interdisciplina revelan personas flexibles capaces de convivir con otros. Los entrevistamos, incluso por Skype a los extranjeros, porque esta residencia no busca resultados determinados, sino que da la libertad a los artistas de crear según la experiencia vivida en terreno. Para ello deben ser tolerantes a las incursiones al aire libre compartiendo con desconocidos”, explica.
El contexto social
Daniela Reyes y José Tomás Olivos convivieron en Bosque Pehuén (Pucón) con el noruego Bjørn Rune Lie y la danesa Katrine Clante. En Chiloé, en cambio, el grupo estuvo integrado por la sueca Siri Ahmed Backstöm, la finlandesa Linda Bondestam y los chilenos Sebastián Ilabaca y Matías Prado.
Una mirada al entorno histórico social se sumó a la visita. En Bosque Pehuén los ilustradores estuvieron acompañados por el sociólogo de Fundación Mar Adentro Francisco Molina para contextualizarlos sobre cultura mapuche. En Chiloé hubo una jornada de contextualización a los ilustradores con Renato Cárdenas –profesor, escritor, historiador y poeta chilote– quien compartió su visión de cómo la naturaleza ha influido en la cultura chilota. Eduardo Mondaca, miembro de CESCH (Centro de Estudios Sociales de Chiloé), habló sobre el impacto de lo histórico en los movimientos y demandas sociales de la actualidad en el archipiélago.
El intercambio internacional e interdisciplinario permitió además crear diálogos con la cultura local ya que los participantes impartieron talleres para profesores y directores de escuelas de Chiloé. Además el domingo 20 se realizó un taller abierto a toda la comunidad en la Plaza de Armas de Castro en la que participaron ilustradores del archipiélago, ente los que figuran Mauricio Alvarez, Ramón Contreras, Nadia Benavides, Javiera Cartes y Marcia Miranda. Las convocatorias fueron realizadas gracias al apoyo de la Corporación Municipal de Castro y del Departamento de Cultura de la Ilustre Municipalidad de Castro.
En el caso de Pucón se trabajó directamente con niños de la Escuela de Paillaco, Escuela Carileufu, donde pintaron un mural, y Escuela Quelhue (cuyo director, Eligio Salamanca, es el premio nacional de Global Teacher Prize Chile).
Científicos y artistas bajo un mismo techo
En Bosque Pehuén (Pucón) los artistas fueron guiados por los ingenieros en Conservación de Recursos Naturales de la Universidad Austral, Daniela Mellado y Javier Godoy, investigadores desde el 2014 en dicha zona de protección. Ellos serán quienes entregarán contenidos científicos y guiarán las caminatas.
El orientador científico del bosque antiguo chilote y del Humedal Pullao de Chiloé fue el investigador de la Universidad Austral Iván Díaz. Además, los ilustradores fueron guiados por el experto en aves, Jorge Cárdenas, del Centro de Estudios y Conservación del Patrimonio Natural, CECPAN , quien participó el 15 de noviembre en la visita a terreno del Humedal Pullao para entregar contenidos científicos de los humedales y observar aves.
La residencia de ilustradores es un proyecto propio de Fundación Mar Adentro. Su equipo, compuesto por artistas visuales, curadoras y un sociólogo, se suma a los 14 profesionales invitados para dirigir y producir el proyecto.
Fundación Mar Adentro es una entidad privada sin fines de lucro que desarrolla programas de arte, educación y naturaleza para fomentar un cambio en la valorización que las personas otorgan al patrimonio natural y cultural.