Con 109 votos a favor y 1 abstención, la Cámara de Diputados aprobó hoy el Proyecto de Ley que crea el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio.
Después de cuatro meses de estudio y votación del articulado en las comisiones de Cultura y Hacienda, en una histórica sesión en la que participaron destacados personajes del quehacer cultural, como Patricio Manns, además de funcionarios y las asociaciones gremiales del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes, la Dibam y el Consejo de Monumentos Nacionales, se despachó al Senado el proyecto que contó con un apoyo transversal que fue valorado por el ministro de la cartera, Ernesto Ottone.
"Esta propuesta recoge significativos procesos de debate ciudadano y del Estado por más de 25 años", destacó Ottone, aludiendo al trabajo de las Comisiones Garretón o Ivelic en los años 90, para luego resaltar que "también incorpora, de manera central, los resultados de la Consulta Indígena,realizada entre 2014 y 2015; y parte sustantiva de las reflexiones y propuestas de organizaciones de creadores y cultores, como la UNA y Sidarte; como asimismo de las asociaciones de funcionarios de los servicios que serán parte de esta nueva institucionalidad: Me refiero a Anfucultura, Anfudibam y los Trabajadores del Patrimonio".
Entre los cambios que enfrentará el organismo con la creación del Ministerio de Cultura, figura la creación dos subsecretarías: de las Artes, Industrias Culturales y Culturas Populares: y la del Patrimonio Cultural.
En la primera estarán instalados los Consejos Sectoriales ya existentes, como lo son los del Arte y la Industria Audiovisual, el Consejo del Libro y la Lectura, junto al Consejo de Música Nacional. Además lo integrarán las Áreas Artísticas pertenecientes hoy al Consejo de Cultura y las manifestaciones culturales populares y comunitarias.
En la segunda existirá la Subsecretaria del Patrimonio Cultural, que evaluará planes y programas en materias referentes al folclor, culturas tradicionales, cultura y patrimonio indígena, e infraestructura patrimonial, y el Servicio Nacional del Patrimonio Cultural, que será el encargado de implementar las políticas, y desarrollar planes y programas en todos los campos.
Tras la aprobación en la Cámara Baja, el proyecto pasará al Senado, donde su Comisión de Educación y Cultura discutirá y votará en general la propuesta. De existir cambios respecto de lo aprobado en la Cámara de Diputados, ésta última deberá revisar y dar su aprobacion, quedando en condiciones de ser promulgada como Ley de la República.
Fuente: Publimetro