Entrevista por Francisca Jiménez. Tania Salazar es Diseñadora UC, y trabaja en cooperación y gestión cultural internacional.
  1. ¿Cómo surge la idea de realizar la iniciativa Artesanos En Feria (AEF)?
La idea surge hace unos meses, movilizada por las medidas asociadas a la pandemia que llevaron, entre otras cosas, al cierre de los espacios culturales, de ferias, y de alguna forma a plantearse nuevas formas de circular para los contenidos culturales. Si bien la reflexión sobre este tema era previa, y se relacionaba no solo con poder mejorar los espacios de feria, también de trabajar nuevas miradas y contenidos para visibilizar a la artesanía y articularla con la programación de espacios culturales. Las circunstancias hicieron que estuviésemos todos más dispuestos a cambios, riesgos y eso ayudó a que pasáramos de la idea a concretar el proyecto.  
  1. ¿Cuál es el objetivo y su proyección?
Artesanos en Feria es una plataforma cultural colaborativa y nuestro principal objetivo es promover la circulación digital de creadores y artesanos para que puedan difundir sus ideas a nuevos públicos. Nuestro foco son las personas, sus ideas, su manera de ver la vida, su mirada creativa, y eso es lo que compartimos con el público, nuestro propósito es que las personas conecten con la artesanía y los oficios desde un lugar distinto a lo que habitualmente hacemos desde la transacción o la compra y venta de objetos, nos situamos antes de eso y desarrollamos estrategias de comunicación que permitan una nueva mirada, una nueva propuesta de valor donde es fundamental la autonomía digital de quienes participan y en eso también está nuestro compromiso, poder contribuir a reducir la brecha que existe en la mayor parte de los creadores, quienes no siempre saben cómo usar a su favor las redes sociales a través de una estrategia que considere el valor cultural de lo que cada uno hace. Nos proyectamos más allá de la pandemia, ya que estamos seguros que este formato llegó para quedarse y es una plataforma que puede en un futuro complementar y fortalecer el formato presencial más tradicional de feria y lo que es más importante, articulando redes creativas con otros sectores artísticos, para terminar con la endogamia que finalmente aleja al público, especialmente al público más joven, que es al que queremos llegar.  
  1. ¿Cómo ha sido la recepción por parte de los artesanos y artesanas, sobre todo ahora en tiempos de pandemia?
Comenzamos el proyecto con un grupo de artesanas que han sido fantásticas y fundamentales en el proyecto y en lo que podamos hacer más adelante, además de las artesanas, nos colaboran otros agentes o artistas, quienes nos entregan miradas complementarias y que precisamente buscamos para el desarrollo de las estrategias y la forma de trabajar. La colaboración no es solo una declaración de intenciones, sino que es una manera de trabajar que está implícita en el proyecto. Por otra parte, la recepción en las redes sociales ha sido muy buena y hemos sentido el interés de artesanos y muchas personas de diferentes disciplinas que valoran lo que estamos haciendo. En unos días habilitaremos un formulario de inscripción para quienes quieran sumarse a las próximas actividades.
  1. ¿Se trata solo de una plataforma de difusión o es transaccional también?
Somos una plataforma de difusión y visibilización, porque nos preocupamos de generar contenidos a partir del valor de cada creador, movilizamos las miradas y el interés hacia su trabajo para que puedan dar a conocer los productos y servicios de manera directa. Nosotros no vendemos objetos, hay mucha gente que ya está haciendo eso y creemos que podemos aportar más desde otro lugar que permita nuevas miradas para conectar con nuevos públicos.
  1. ¿Cómo ves el uso de las Redes Sociales en el impulso de este tipo de iniciativas? ¿Es un factor que logra llegar a los diferentes territorios?
Sin duda el contexto ayuda mucho a poder impulsar una iniciativa así, estamos todos sumergidos la mayor parte del tiempo en entornos digitales, aprendiendo y lo que es más importante tomando riesgos y cometiendo errores, atreviéndonos a tomar desafíos y a salir de la zona de confort, algo que antes no habríamos hecho con tanta facilidad. Los mismos artesanos han visto la utilidad de aprender de las redes para su propio beneficio profesional y eso hay que aprovecharlo, sobre todo teniendo a los niños en casa, quienes son los que mejor saben usar estas herramientas.